PixelArtworks
United Kingdom
Museums & science centers
Christie D13WU-HS
Mapeo del viaje de Concorde
Con capacidad para volar al doble de la velocidad del sonido a una altitud de 60.000 pies, el legendario avión de pasajeros Concorde cruzaba el Atlántico en menos de tres horas. El Alpha Foxtrot –última de las 20 naves supersónicas construidas y la última también en volar– efectuó su primer despegue en 1979. El aterrizaje de despedida lo llevó a cabo en noviembre de 2003 en Filton Airfield, donde quedó en hibernación hasta 2017, cuando un grupo de ingenieros de British Airways y Airbus lo remolcaron con todo cuidado por el aeródromo hasta un nuevo hangar construido en Aerospace Bristol expresamente para albergarlo. El hangar es hoy la principal atracción de este museo aeroespacial, para el que la empresa de diseño de exposiciones Event encargó a la productora creativa PixelArtworks una narración inmersiva que hiciera honor al extraordinario alarde tecnológico representado por el Concorde, sin duda uno de los logros aeronáuticos más increíbles de nuestra era.
Como parte de un proyecto museístico presupuestado en 19 millones de libras, por indicación de PixelArtworks se decidió adquirir cuatro proyectores láser Christie D13WU-HS, con el objetivo de hacer que Alpha Foxtrot fuera una projection mapping irrepetible. El contenido creado para la proyección funde material fílmico icónico, entrevistas exclusivas y efectos gráficos, proyectados sobre el fuselaje delantero de un Concorde para llevar a los visitantes de viaje por el pasado del mito de la aviación. La animación dura 12 minutos y se divide en seis secciones, en las que se nos explican los primeros pasos del diseño de la nave, la complejidad técnica del motor, o se nos muestran imágenes de celebridades como Joan Collins, George Harrison y Andy Warhol a bordo del aparato, así como iconografía de la Union Jack, trayectorias aéreas y hasta imágenes en rayos equis del fabuloso avión. El audio enriquece las imágenes con comentarios de ingenieros, pilotos o auxiliares de vuelo, que hablan de sus experiencias a bordo del Concorde, dando vida a este moderno ejemplo de excelencia aeronáutica.
"Para la animación, creamos tres capítulos de contenido", explica Gavin MacArthur, Director Creativo de PixelArtworks. "Con el primero, dedicado a la fabricación del Concorde, queríamos captar la historia y el reto que el proyecto planteaba, así como la ingente tarea de ingeniería que en su día implicó. Intentarlo y lograrlo supuso un éxito asombroso, y nosotros queríamos captar y transmitir ese éxito. El segundo capítulo aborda el diseño técnico. El camino estaba sembrado de incontables obstáculos técnicos; todo había que hacerlo desde cero: sistema de refrigeración, consumo de potencia… Había que diseñar y probar infinidad de aspectos. El tercer y último capítulo se centra en la conexión emocional de las personas implicadas. Pilotos, ingenieros, todos cuantos participaron en la construcción sintieron una vinculación emocional que fue fundamental para el proyecto. En este hangar, el Concorde es el héroe, el protagonista absoluto, y nuestro trabajo aspiraba a ponerlo de relieve".
PixelArtworks tuvo la ocasión de hablar con pilotos, ingenieros y auxiliares de vuelo que en su día trabajaron en el Concorde, y que han aportado una perspectiva muy valiosa y multitud de anécdotas. "No fue algo estrictamente técnico, sino muy emotivo", comenta Gavin. "Lo que nos quedó claro es que un gran número de personas habían invertido mucho tiempo en el proyecto del Concorde. Además, fue un avión bellísimo, y no podíamos estropearlo con un contenido que no estuviera a la altura. Teníamos que hacerle justicia y asegurarnos de que la información era técnicamente correcta".
La idoneidad del contenido se testó en un modelo 3D en el estudio, que se presentó al cliente para que lo visualizara antes de finalizar el proyecto. El modelo se creó usando un escáner láser en la aeronave, tomando medidas precisas de más de tres millones de puntos. PixelArtworks llevó a cabo 50 escaneos distintos, combinando todos los puntos para formar una nube tridimensional. El resultado fue un modelo exacto.
En la instalación, los proyectores D13WU-HS de Christie funcionaron a 50hz en resolución WUXGA. "Habíamos usado proyectores láser de Christie en instalaciones anteriores y sabíamos que su tamaño era el adecuado y que tenían todas las capacidades de control que necesitábamos", explica Jackson Taylor, Jefe de Tecnología de PixelArtworks. "El láser como fuente lumínica garantiza cinco años de luz, justo lo que necesitábamos en este proyecto. Cuatro de los proyectores cubrían con facilidad un tercio del avión, haciéndolo muy visible. Al no ser excesivamente alto, podían acercarse mucho con el zoom, consiguiendo que se vea con gran brillo y muy destacado. Y como la unidad tiene HDBaseT, la instalación resultó muy fácil, pues no necesitábamos receptor extra, y pudimos llevar cable Cat6 hasta el mismo proyector".
PixelArtworks ha diseñado también las estructuras para alojar los proyectores, que se montaron directamente sobre el suelo para que el ángulo de visión se alineara con el ángulo de proyección óptimo y lograr así la mejor experiencia de visionado. Las estructuras de alojamiento están ocultas con gran elegancia, formando cuatro puntos de información que ofrecen más detalles sobre el diseño del avión.
Durante los primeros diez meses tras la inauguración, más de 150.000 visitantes visitaron la atracción, con una cantidad inusitada de valoraciones de cinco puntos enviadas a webs como TripAdvisor, Facebook o Google.
"Estoy muy orgulloso de este proyecto. Cuando se trabaja desde dentro es difícil distanciarse y ver cómo va quedando. Pero en cuanto vimos el resultado final, supimos que el trabajo estaba bien hecho. Y las reacciones lo confirman", concluye Gavin.